Viaje a Costa Rica, primera parada: TORTUGUERO

Costa Rica es espectacular, un paraíso natural. Aún sigo sin poder creer que en un país tan pequeño como es Costa Rica (más pequeño que Andalucía en cuanto a superfície) tenga aproximadamente el 5% de la biodiversidad mundial. ¡Es una locura!

Es un gustazo darte una vuelta por cualquier sitio y acabar con una larga lista de nuevas especies vistas, sin duda echaré de menos este precioso y salvaje trocito del planeta.

Nuestro viaje empezó el 2 de abril por la madrugada, yendo desde Alicante hasta Madrid donde tuvimos que esperar unas horitas para subir al avión, los aeropuertos y yo no nos llevamos muy bien, ya que los momentos antes cuando tienes que pasar los controles, sacar cosas de la maleta, poner los aparatos electrónicos aparte, etc. ¡me estresa mucho! pero poco a poco me voy acostumbrando y ya no me pone tan nerviosa.

Nuestro vuelo no era directo, hicimos escala en Zurich donde aprovechamos para comer y conocimos a dos chicas de Costa Rica muy amables, nos respondieron todas las dudas que teníamos sobre Costa Rica y nos dieron sus números de móvil por si necesitábamos algo durante nuestra estancia en su país. Sin estar en Costa Rica, ya pudimos ver la bondad y amabilidad de su gente. ¡Y la escala se pasó muy rápido! Ya de nuevo en el avión rumbo a Costa Rica aprovechamos para descansar un poco para coger fuerzas. ¡Nos esperaba un comienzo de viaje un poco duro!

Llegamos al aeropuerto de San José sobre las 23h y fuimos a por el coche que teníamos alquilado, desde allí y con nuestro mapa offline pudimos llegar sin perdernos demasiado al hostal donde pasaríamos solo unas horitas, ya que a las 5 de la mañana ya estábamos saliendo por la puerta rumbo a nuestro primer destino :)

Primera parada, TORTUGUERO

Dejamos nuestro coche en La Pavona y desde allí nos llevaron por el río hasta el Parque Nacional de Tortuguero.

Los paisajes durante el recorrido que duró aproximadamente una hora eran preciosos, Manu y yo no podíamos dejar de mirar todo, ¡apenas hablamos! no podíamos sacar los ojos de la vegetación, del agua, de todos los bichillos que se movían... Temíamos pestañear y perdernoslo.

Nos alojamos en Cabinas El Icaco y nada más llegar ya vimos dónde íbamos a pasar algún que otro ratillo de relax:

Se estaba taaan agusto en estas hamacas escuchando las olas del Caribe de fondo que en más de una ocasión nos quedamos dormidos, ¡era un somnífero!Y más después de todo lo que hacíamos por el día :)

En Tortuguero estuvimos el día 4 de abril (llegamos sobre la hora de comer), el día 5 y el 6 nos fuimos muy temprano a nuestro siguiente destino.

En el poquito tiempo que estuvimos en este paraíso pudimos hacer varias actividades, salimos en canoa por el parque y vimos un montón de animales!

Eramos incapaces de ver a este basilisco entre la espesa vegetación

Al contarle la experiencia a mi padre vía WhatsApp fue muy divertido, la conversación fue más o menos así:

Yo: Papá! he visto un montón de cosas esta mañana, hemos ido con una barquita por el río y hemos visto taantos animales!! me he hinchado a ver pájaros! había reptiles súper difíciles de ver! también vimos un mono muy simpático, se puso muy cerca de donde estábamos y pudimos ver una mamá caimán con sus bebés!

Respuesta de mi padre: BARQUITAAA?!? CAIMÁN!?!?!?!?😱

¡Morí de la risa con su respuesta!

Otra actividad que hicimos fue una ruta nocturna, ves otro mundo totalmente. Había insectos por todas partes y grandes, ¡muy grandes! Había muchos que se chocaban con nosotros al ser atraídos por la luz de nuestras linternas, fue un poco agobiante pero vimos cosas realmente curiosas.

Y la última actividad que hicimos (todas las hicimos con la empresa Costa Rica Root Tours) fue por una ruta andando por el parque donde pudimos ver otros muchos animales: reptiles, monos, aves y un perezoso. ¡Fue impresionante ver tan de cerca todos los animales! Y los guías eran fantásticos.

Cuando pusimos rumbo a nuestro siguiente destino (San Gerardo de Dota) nos esperaba un perezoso colgado de un cable, ¡para despedir Tortuguero de la mejor manera posible!

 En la próxima entrada... ¡San Gerardo de Dota!